martes, 21 de febrero de 2012

Estremecedor relato de la madre de la mujer desaparecida, Andrea López.

La Arena.

En entrevista con Radio Noticias, Julia Ferreyra disparó que "hay que saber lo que Purreta" hizo con su hija. Ejemplificó que el adolescente se liberó tras brindar su testimonio en la Cámara Gessell. 

 "Cuando terminó de declarar en la Cámara Gessell, mi nieto me abrazo y dijo que por fin se podía sacar todo el peso que tenía encima", dijo Julia Ferreyra, madre de Andrea López y abuela del menor de 13 años, hijo de la mujer desaparecida que arremetió contra el ex boxeador Víctor Manuel Purreta al considerarlo culpable de la muerte de su madre.
En diálogo con Radio Noticias, la mujer sostuvo que su nieto le venía contando la historia de la muerte de su madre desde que tenía siete años. "El chico relató que la noche del 10 de febrero de 2004, cuando tenía cinco años, vio a su padre ahorcar a su madre con un rebenque y con estas nuevas medidas probatorias el juez llamó a indagatoria a Purreta, aunque por la feria judicial la fecha se fijó recién para hoy (por el viernes)", dijo a LA ARENA en su momento el abogado querellante Omar Gebruers.

Por su parte, Ferreyra dijo que, a pesar de conocer la historia contada por el adolescente, no podía brindar ese testimonio ante las autoridades judiciales tras prohibírsele ser querellante en la causa. "El no está inventando nada, ni le hemos puesto cosas en la cabeza porque todo fue estudiado, para nada está mintiendo", expresó la mujer. Y reiteró que el menor lleva "una carga muy grande en su cabeza" aunque va a tratar de poder seguir con su vida de la manera más normal posible. "Con sus añitos, llevaba consigo un infierno", disparó. Y ejemplificó que el chico debía algunas materias del colegio secundario pero, al realizar la declaración en Cámara Gessell, se liberó y empezó a rendir todas las asignaturas que le quedaban pendiente. "Antes de ese proceso, el nene tenía la cabeza puesta en otro lado", agregó.

Obstáculos.

Julia sostuvo que fue muy doloroso todo lo que vivió su nieto pero fue optimista al afirmar que "las cosas van a cambiar en su familia cuando se haga justicia y pueda conocer donde está su madre. Tenemos que saber lo que Purreta hizo con mi hija", disparó.

La madre de Andrea resaltó que, en la actualidad, lo que más le importa es el "sufrimiento" que su nieto lleva consigo. No obstante, agradeció a toda la gente que ayudó a la familia a superar los momentos más duros y acompañaron en todas las situaciones.

"Desde que mi nieto está conmigo, hace seis años, tiene que hacer tratamiento psicológico", expuso. Y añadió que ella tuvo que atravesar por diferentes obstáculos para lograr estar con el chico. "Antes de tenerlo, iba a la Casa de Gobierno, lo veía, pero me hacían sentir que era una delincuente. Me daban
apenas un cuarto de hora, él estaba con su abuela paterna quien después me lo terminó entregando porque ya no lo podía tener".

Por último, la mujer amplió que a los siete años, el hijo de Andrea empezó a hablar de todo lo que sabía tras mirar una novela en televisión y sentirse identificado. El disparador de toda esta situación, según resumió la abuela, fue la televisión ya que el menor comenzó a elaborar todo el relato que tenía guardado y a poner en palabras lo vivido. "Hoy tengo que trabajar, porque si no lo hago, no podría tener fuerzas para poder seguir adelante en búsqueda de la verdad",generalizó. Y completó que hace quince años que se quedó viuda por lo que se gana la vida, hasta el día de hoy, como empleada doméstica.


Estremecedor.

Por otra parte, la ex subdirectora de Políticas de Género de la Municipalidad de Santa Rosa, Mónica Molina, identificada desde hace varios años con la problemática de la violencia de género, opinó del caso al que calificó de "estremecedor". Dijo que "estamos conmovidos, afectados, y no nos deja de impactar todo este tema más allá de las sospechas que todos teníamos". Y expuso que, durante mucho tiempo, se reclamó por una respuesta que comienza a darse a la luz en la actualidad.

"Deberíamos trasladar todas las preguntas que tenemos a los funcionarios públicos de su momento, de los cuales, varios de ellos, aún persisten ejerciendo cargos", expresó. Para Molina, el Estado no tuvo los reflejos suficientes o las intenciones necesarias para develar lo que estaba pasando con este tema.

Calificó que "no es un tema menor" el desempeño del funcionario público y que existe una consecuencia de lo que implicó la espera en la vida del hijo de Andrea. Y cerró que "de fondo el Estado no funcionó debido a que no puedo pasar tantos años sin respuestas concretas".

No hay comentarios:

Publicar un comentario